Pero después de la caída, siempre te levantas
No creas que todo termina acá, me dijeron; semestre de la resurrección.
Y si, el cambio, siempre es bueno y el fénix siempre esta conmigo.
Ahora, empieza el verdadero juego, donde demostras lo que vales, si tu palabra pesa, o solo son letras sueltas, si tu capacidad es tanta como proclamas.
Ella carbonizo sus ojos y se paro frente al mundo con una mirada en llamas.
El fuego es bueno para este frió invierno.
Nena, vos sos el fuego, sos la luz, y lo que quieras.
El viento soplo y desarreglo todo, asi era mejor, natural, espontaneo; si no te gusta, no lo mires.
No compres lo que no te agrada, es lo que hay.
Y soy lo que soy
Las calles tiemblan con heladas, somos todos culpables hasta que se demuestre lo contrario, no podes leerla, ni intentar engañarla, ya que la red de mentiras es su capa de otoño.
No existen palabras para tirarte, el acero esta en tus huesos, el hierro en tu voluntad.
Ella lleva las uñas rojas, teñidas después de todas las batallas, resaltan, distraen, incomodan.
La impertinencia es su mejor amiga.
Y vos, engreído extraño, camina lentamente hacia tu fin.
Para matar tanto ego, hace falta alguien así.
No confíes, la experiencia te enseña.
Solamente se perra.
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